Abrir una empresa en su casa está repleto de posibilidades, principalmente por lo que nos posibilita prescindir la compra o bien alquiler de un espacio comercial, cosa que exige un buen tiempo, muchos factores a considerar y una esencial inversión económica. Y sabiendo como está el panorama empresarial, cualquier posibilidad de ahorro es ideal. Algunas de las oportunidades que tiene invertir en un una actividad empresarial en la casa, es que se puede elegir su propio horario, estar en un escenario agradable, cerca de las personas que nos importan, no invertiremos dinero en recorridos ni en comidas en la calle. A favor de esto, vamos a conseguir tiempo y por tanto, dinero, en cualquiera de los sentidos. Un detalle que debes tener en consideración para abrir una oficina en casa es que tienes que tener clarísimas las ideas, esto quiere decir, establecer muy bien la clase de actividad laboral que vas a empezar. La elección final dependerá totalmente mucho de aspectos como tu perfil profesional, tus características como persona, tu público objetivo, la competencia que tengas, etc. Puedes, por servirnos de un ejemplo, ofrecer algún tipo de asesoría o dedicarte a dar algunos servicios para particulares, elaboración, vender o bien alquilar productos y/o servicios, escribir un weblog, una página web o bien tienda on-line, etc. Llegado el momento de escoger una gran idea de emprendimiento en su casa debes pensar previamente sobre tus habilidades personales, tu formación, tu perfil profesional, los productos o servicios más solicitados y, a ser posible, que no tengan mucha competencia, pero sí aquellos que puedan tener una buena acogida. Cuando hayas elegido el sector de empresa que crearás, tu próximo paso será escoger ese área de trabajo y acomodarlo para tal efecto. Teniendo en cuenta el tipo de negocio y del espacio que tengas disponible en tu casa, debes determinar el lugar en donde organizarás tu tarea. Por servirnos de un ejemplo, puedes habilitar como despacho la habitación de invitados, acomodar algún espacio del salón, adecuar la terraza si la tienes cerrada al exterior, etc. El fin es encontrar con la opción más correcta en función a la elección del clase de trabajo. En caso de que tu negocio sea on-line, como mínimo tiene que contar con un mobiliario con espacio suficiente para poner nuestro portátil o dispositivo, una silla cómoda, alguna estantería o bien armario para archivos y documentos, un teléfono, fijo o móvil, con número diferente al de casa y al personal, acceso a internet, etc. Con idea de tener más sitio y comodidad, evitaremos todos los objetos que no tengan relación con el trabajo. Si ya estás convencido de empezar a trabajar desde tu propia casa y tienes a punto tu espacio de trabajo, lo siguiente sería establecer las funciones y tareas del propio negocio. En resumen, debes decidir cuál sería tu público objetivo, fijar tu horario laboral y de atención al usuario, determinar los tarifas de tus productos y/o servicios, diseñar o enviar a hacer el diseño tu sitio web, hacerte con la licencia de funcionamiento, etc. Después de hacer todo esto, sería el momento de localizar tus primeros clientes del servicio. Para hacerlo, puedes empezar comentándolo con familiares, amigos y conocidos y también invitarlos a que prueben tu producto o servicio, y, caso de que tengan una opinión positiva, que lo comenten con otros contactos. Otra forma de promocionarte y de incrementar tus clientes puede ser haciendo un reparto de tarjetas personalizadas o bien panfletos, además de poner anuncios en diferentes sitios webs para promocionarte a través de anuncios clasificados, redes sociales, blogs, revistas digitales, etcétera. Trabajar desde tu casa también tiene sus riesgos y desventajas, y es que puede llevarte en algunos momentos a perder esa imagen de profesionalidad que se presenta al ubicar tu trabajo en unas instalaciones acondicionadas y con su cartelería corporativa. Principalmente por esta razón, apostar por un trabajo en el domicilio consiste en respetarlo y conservarlo en todo instante. Para esto, debes ofrecer un producto o bien servicio impecable, preservar una atención agradable, cumplir con los horarios de atención al cliente, respetar los tiempos de reparto de tus artículos, atender al cliente con la indumentaria laboral, nada de pijama o de ropa de estar por casa, etcétera. Es conveniente y muy importante, pedir a nuestros compañeros de hogar que respeten de la misma forma nuestro negocio, rogándoles que estén en silencio cuando estén cerca de nuestro zona de trabajo y que procuren no molestarnos en nuestro horario de trabajo, a menos, claro está, que se trate de algo importante

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